En una pequeña villa vikinga llamada Flake, el joven Wickie lleva una vida feliz y apacible. A su padre, Halvar, jefe de los vikingos, le habría gustado tener un hijo un poco más valiente e intrépido. Así que él y su banda deciden llevarse a Wickie en sus viajes para que adquiera la experiencia necesaria para convertirse en un verdadero vikingo con el tiempo.
Sin embargo, de alguna manera, Halvar y sus hombres acabarán atrapados en un lío tras otro y será Wickie, en la mayoría de los casos, quien les eche una mano gracias a su ingenio.