Zorori tiene el deseo de construír su propio castillo y convertirse en Emperador del Mal, aunque es muy torpe y sus planes siempre fracasan; incluso cuando intenta hacer alguna cosa mala, al final siempre acaba cometiendo una buena acción... Y no por ello deja de esforzarse, es siempre positivo, vital y no se dejaría desanimar por cosas tan insignificantes. Seguido por sus jóvenes compañeros Ishishi y Noshishi, causa furor allá por donde pisa y siempre está rodeado de una gran expectación.
¿Conseguirá hacer su sueño realidad?