La tierra de Crystania ha sido un lugar pacífico durante algún tiempo. Pero como un mal sueño, la tranquilidad se disipó por causa de unas pesadillas nacidas en la más negra y profunda de las noches. Los sellos que protegían Crystania se deshicieron, y la Campana del Despertar sonaba sin cesar mientras que el terror se desencadenaba entre la gente.
Tornados, basiliscos y Señores Dragón deambulaban anunciando el retorno del Rey Barbas. Con cada segundo, la tierra quedaba más y más destrozada. Pueblo tras pueblo eran destruidos, y los dioses de Crystania eran los siguientes. Sólo el Rey Ashram, atrapado en el Mundo del Caos, proporciona un rayo de esperanza. Pero, ¿serán suficientes la inocencia de Redon y el amor de Pirotesse para proporcionarle un camino de vuelta a casa?